La enseñanza buddhista es la más amplia que el mundo ha conocido, y al mismo tiempo se afirma que sus adherentes alcanzan a la mitad de la humanidad viviente. Será conveniente pues, en esta culta época, que dispongamos de toda la información posible concerniente a la más difícil de todas las ciencias: la ciencia del vivir. El Buddha Gautama fue un maestro en el arte de vivir, y su penetrante, lógico y razonable punto de vista acerca de la vida y sus responsabilidades habrán de ser muy útiles para rectificar las actuales costumbres, que encadenan la mente de los hombres.