Fría, distante... y la más irresistible .
Dante Romano no tenía la menor duda de que Mia Hamilton, la joven viuda de su padre, era una implacable buscavidas. Sin embargo, saltaban chispas entre ellos. Mia era un volcán a punto de estallar.
Y estalló en un inolvidable encuentro que dejó a Dante atónito al descubrir su inocencia. La atracción entre ellos era innegable, pero Mia guardaba un secreto que había jurado no revelar nunca.
Había llevado el escándalo a la importante familia Romano.