El rincón feliz es una novela de Henry James. De el incipit del libro: —Todo el mundo me pregunta qué «pienso» de todo —dijo Spencer Brydon—; y yo respondo como puedo, eludiendo o desviando la pregunta, quitándome a la gente de encima con cualquier tontería. En realidad a nadie le debería importar —prosiguió—, pues aun cuando fuera posible satisfacer de ese modo (parece que me estuvieran diciendo: «¡La bolsa o la vida!») demandas tan estúpidas en torno a un tema de tanta trascendencia, lo que yo «pensara» seguiría teniendo que ver casi exclusivamente con algo que sólo me afecta a mí.