La bella Rapunzel está encerrada en una torre muy, muy alta, visitada sólo por la hechicera que la encarceló. Hasta que un día un apuesto príncipe pasa a caballo y queda cautivado por el mágico sonido del canto de Rapunzel. La canción le llegará al corazón de tal manera que sabrá que debe acercarse a ella...