Jean Jacques Rousseau escribió Emilio o la educación en 1762 y desde entonces la consideró como “la mayor y más importante de mis obras”. En ella el autor aborda temas políticos y filosóficos que tienen que ver con la relación entre el individuo y la sociedad y con como este puede conservar su bondad natural mientras participa de una sociedad “inevitablemente corrupta”.
A través de una historia novelada entre el joven Emilio y su tutor, el autor suizo postula sus ideales de cómo debe educarse al ciudadano ideal. Hoy en día se considera este libro como el primer tratado sobre filosofía de la educación en el mundo occidental.