En esta obra destaca sobremanera el genio militar de Lisandro de Esparta, famoso por recibir en vida honores divinos antes que el propio Alejandro, y la forma en que derrotó al imperio ateniense, prácticamente sin dinero y en el terreno de su enemigo: en el mar.
No sería la última vez que una potencia de tierra pudiera vencer a un imperio marítimo. Alejandro demostró que a pesar de que cada circunstancia histórica es única, se pueden tomar lecciones del pasado para forjar el futuro. Una lección seguida por Aníbal, Escipión y César, entre otros personajes posteriores.
Jenofonte (ca. 431 a. C.-354 a. C.) fue un historiador, militar y filósofo de la Antigua Grecia. Como historiador, Jenofonte fue un cronista de su tiempo, finales del siglo v e inicios del siglo iv a. C., en obras como las Helénicas, sobre los últimos años y las consecuencias de la guerra del Peloponeso (431-404 a. C.) y la continuación temática de Historia de la guerra del Peloponeso de Tucídides.
Como miembro de la Expedición de los Diez Mil, participó de manera crucial en la fallida campaña militar de Ciro el Joven para reclamar el trono de Persia a su hermano Artajerjes II y relató la odisea de los mercenarios griegos en su obra más famosa, la Anábasis. Al igual que Platón, Jenofonte es una autoridad en su maestro Sócrates, sobre el cual escribió varios libros de sus diálogos en Recuerdos de Sócrates y la Apología de Sócrates, que trata de aclarar su juicio en el 399 a. C.