El hombre es un puente que une lo animal con lo divino, y la conciencia de esta dualidad de la naturaleza es lo que nos hace humanos.
Recuerda, la vida consiste en las cosas pequeñas; no hay cosas grandes. Las cosas pequeñas acumuladas se convierten en cosas grandes. Un único acto puede no parecer muy significativo como bueno o malo. Una sola sonrisa no parecerá importante, pero una sonrisa es parte de un largo proceso.
Ciertamente, una sola flor no es la guirnalda, pero no habrá ninguna guirnalda sin flores que la compongan.
Osho ha sido descrito por The Sunday Times de Londres como «uno de los mil artífices del siglo XX» y por el Sunday Mid-Day (India) como una de las diez personas -junto a Gandhi, Nehru y Buda- que han cambiado el destino de la India. En una sociedad donde tantas visiones religiosas e ideológicas tradicionales parecen irremediablemente pasadas de moda, la singularidad de Osho consiste en que no nos ofrece soluciones, sino herramientas para que cada uno las encuentre por sí mismo.