En esta novela con mucho de autobiográfico, Pablo Ramos exhibe sus extraordinarias dotes de narrador a través de una escritura luminosa y precisa, de ritmo apasionante, que sabe que el humor es más poderoso que la autocompasión y que, si se la deja vibrar, la vida se abre paso incluso donde no se ve camino.
Gabriel está dejando de ser niño. Crece en su barrio, El Viaducto, entre la villa Mariel, las vías del Roca y el arroyo Sarandí. Gabriel tiene un amigo grande que duerme en el cementerio. Aprende mucho de él y de las tumbas. En el barrio de Gabriel, el agua podrida del Sarandí se incendia. Juega con una barra de pibes, aunque jugar, cuando se vive en El Viaducto, también es jugar con la muerte.
Un país está dejando de existir. Los ochenta están comenzando y la infancia va quedando atrás entre damajuanas de vino, colectas para pagar por sexo, amistades probadas en el peligro y el miedo. Hay muerte y hay pérdida al final de la infancia. Pero lo que nunca se pierde es el deseo, y El origen de la tristeza no renuncia a la alegría.
En esta novela con mucho de autobiográfico, Pablo Ramos exhibe sus extraordinarias dotes de narrador a través de una escritura luminosa y precisa, de ritmo apasionante, que sabe que el humor es más poderoso que la autocompasión y que, si se la deja vibrar, la vida se abre paso incluso donde no se ve camino.
Pablo Ramos nació en 1966 en Avellaneda, provincia de Buenos Aires. Es autor del libro de poemas Lo pasado pisado y de las novelas El origen de la tristeza, La ley de la ferocidad, El sueño de los murciélagos -que recibió el The White Ravens al ser seleccionada por la Jugendbibliothek-, En cinco minutos levántate María y El origen de la alegría. Su libro de relatos Cuando lo peor haya pasado obtuvo el primer premio del Fondo Nacional de las Artes en 2003 y el primer premio Casa de las Américas (Cuba) en 2004. Publicó también el libro de relatos El camino de la luna y el de crónicas Hasta que puedas quererte solo. Su obra ha sido traducida al francés, al alemán, al serbio y al inglés. Residió un año en Berlín, en el marco del Programa de Artistas del DAAD. Como músico, es cantante y líder de la banda Disléxicos, orquesta de rock, y compuso las canciones del disco El hambre y las ganas de comer, Premio Gardel 2011, junto con el recordado Gabo Ferro. Como guionista, junto con Oscar Frenkel, mereció el Premio Ópera Prima del INCAA por El estaño de los peces -basada en El origen de la tristeza- y el Premio Tato al mejor guion televisivo 2015 por Historia de un clan. Escribió y condujo el programa Animal que cuenta, emitido por canal Encuentro.