Al leer este resumen, aprenderá a tener más en cuenta el azar a la hora de tomar decisiones.
También aprenderá :
que el ser humano no está dotado para pensar racionalmente
que los economistas, los periodistas y los comerciantes no son tan fiables como parecen;
que el éxito no es necesariamente sinónimo de competencia o inteligencia
cómo afrontar mejor la imprevisibilidad;
cómo ser más sabio.
El azar, a veces llamado suerte o destino, es un parámetro inevitable de los acontecimientos y de la vida misma. Sin embargo, el ser humano se empeña en querer reducir su importancia, creyendo en su arrogancia poder controlarlo, o incluso hacerlo desaparecer. Así, expertos de todo tipo, comerciantes e incluso economistas se jactan de predecir el futuro... hasta que se equivocan, lo que inevitablemente ocurre. Como el azar es seguramente más fuerte que la razón humana, sería más prudente ser humilde. Si el hombre es irremediablemente falible e incapaz de pensar correctamente, ¿no sería mejor tener en cuenta esta limitación, en lugar de intentar combatirla? ¡Descubra algunas claves para hacerlo!