Luis Alfredo Rosatti trabaja con una poética realista en su acepción más amplia a la vez que se sumerge en la libertad estética en busca de formas propias de expresión. En sus obras, las criaturas que desfilan tienen dimensiones múltiples. Traen consigo una dosis de crueldad, de angustia, de frustración y de locura. Estos personajes luchan ferozmente por sobrevivir. No obstante, se encuentran atravesados por un humor satírico, irreverente, que actúa como un espejo convexo y les devuelve una reproducción grotesca de sí mismos. Estos seres disparan lenguajes, imágenes, situaciones, estados, y transitan a manotazos y empujones un conflicto presente en cualquier época: el de cambiar la descarnada realidad que les toca vivir.