Lo que iba a ser un matrimonio de conveniencia se fue convirtiendo en pasión.
Un comprometedor vídeo había arruinado la reputación de Jeffey Harper. La propuesta de su padre de partir de cero conllevaba algunas condiciones. Para construir un nuevo resort de lujo en Plunder Cove, el famoso hotelero debía sentar antes la cabeza y celebrar un matrimonio de conveniencia. Jeffey no tenía ningún inconveniente en hacerlo hasta que la aspirante a chef Michele Cox le despertó el apetito por algo más picante que lo que un contrato permitiría.