13 horas en Viena

3'5/5 - Como ya sabréis, no suelo leer libros de romántica porque me gusta que una historia tenga acción y aventuras. Sin embargo, este libro me llamó la atención desde el primer momento en el que leí la sinopsis. Fui un poco a la aventura al no ser un género que suelo leer con frecuencia. La escritura de la autora me ha gustado mucho. Es sencilla y muy legible. Te cuenta las cosas con detalle y nada queda flojo. Además, en mi opinión, ha creado una historia diferente dentro de un género en el que parece haberse escrito todo. Respecto a su lectura, he de reconocer que he experimentado momentos de adicción y momentos de parón. La primera mitad del libro se me ha hecho un poco lenta, es muy introductoria y me ha hecho leer un poco con miedo. Pero, una vez pasada esa parte, me he enganchado al libro completamente. Me he dado cuenta de que este libro tiene un interlineado bastante ancho por lo que la lectura de cada página es rápida. Los personajes tienen, cada uno de ellos, una personalidad particular que me ha encantado. También, he de señalar que son personajes muy reales que permiten al lector identificarse con ellos. El libro está narrado por los dos personajes principales que se van repartiendo los capítulos. En primer lugar está Kat, una chica que tiene las ideas muy claras respecto al tema del amor. No quiere atarse a ninguna relación y lo deja claro en más de una ocasión. Por otro lado, esta Erik, un chico que tiene un pasado con Kat y es precisamente lo contrario a ella. Su forma de ser y de pensar me ha gustado mucho aunque en algunos casos me ha parecido que actuaba un poco mal. Las amigas de Kat, Diana y Nicole, han sido muy adorables. Me encanta lo loca y divertida que es Diana. La típica amiga que te saca sonrisas cuando estás mal y te saca los cotilleos sin que te des cuenta.

Para empezar quiero compartir una idea con vosotros, y es la siguiente: 13 horas en Viena es una maravilla que vale muchísimo la pena. ¿Qué por qué digo esto? Bien, os lo explicaré: —Esta historia es fresca, real y palpable. Sí, palpable. Tal y como está narrada, parece que sea un diario propio en el que explicas tu día a día. En otras palabras: se siente como tuyo. Paula ha creado algo ligero que da vida. No sé si es por sus personajes o por su lenguaje. Este último, bajo mi punto de vista, es ideal. Coloquial y sencillo a la par que meticuloso y exquisito. Apropiado se queda corto. —En cuanto a los personajes, no sabría decir cuál es mejor (aunque sí, soy súper team Erik, todo sea dicho). La escritora ha logrado que la empatía con todos ellos sea instantánea. Parecen tan reales, tan cercanos, que la necesidad de irte de copas con ellos (o a hacer otras cosas un pelín más obscenas...) sea inevitable. Todos ellos están muy bien construidos. Todos ellos son potentísimos. —Por último, quiero dedicarle unas palabras a la trama. Esta va sola. Es decir, fluye como el agua en un río. No es enrevesada, ni surrealista, ni fantasiosa (y que conste que amo la fantasía), y aún así tiene magia que brilla por sí sola. Simplemente, te absorbe. Me he sentido tantas veces reflejada en ella que asusta y encandila a partes iguales. —En definitiva, Paula tiene magia en sus dedos y, en consecuencia, también lo tiene su historia, su prosa y sus personajes. Y poco más hay que añadir. Solamente un detalle más: las ganas que tengo de coger 13 noches en Oslo y devorarlo son inmensas. Necesito saber más de Kenny, un personaje secundario que os encandilará en esta primera parte tan frenética, conmovedora y divertida. Prepárate para reír, llorar, sufrir y arder. Pero sobre todo, prepárate para disfrutar; y haz lo mismo que desearas constantemente que haga Kat: déjate llevar.

Este libro nos cuenta la historia de Erick y Kat, dos jóvenes deportistas que coinciden en una competición en Viena. Kat se dedica al boxeo, es su vocación, su pasión y su futuro. Aunque tiene otro trabajo porque no puede vivir del boxeo. Por su parte, Erick, se dedica al salto, aunque su verdadera vocación es ser actor. Su primer encuentro es bastante peculiar, y creo que es mejor que lo conozcáis por vosotros mismos. A partir de ese momento, ellos empiezan a pasar más tiempo juntos, pero deciden dejar su relación como una cosa de 13 horas en Viena. Después de eso, en el presente, Erick y Kat se reencuentran por casualidades de la vida y tienen que afrontar que quizás lo suyo no se puede quedar en Viena. La historia está narrada en primera persona por los dos protagonistas, Kat narra el presente (que sucede en París) y Erick narra el pasado (cuando estaban en Viena). Creo que eso te ayuda a conocer mejor a los personajes que si estuviera narrado en primera persona. Pero, me hubiera gustado que Erick narra algún capitulo que sucede en París, y Kat alguno de Viena. Es el primer libro que leo de la autora, y tengo que decir que me ha encantado como escribe. Ha sido muy fácil leer el libro, tanto por la historia en sí (que engancha muchísimo) como por la manera de escribir de ella. Su pluma está cargada de magia, de pasión, y es completamente imprevisible. En este caso, creo que es porque Kat en sí es imprevisible. Me ha gustado mucho el cambio de roles que hay en el libro, me explico. Es muy difícil encontrar una historia en donde sea la chica la que tenga miedo al compromiso y el chico el que no le importa mostrar lo que siente. Quizás ha podido ser complicado para la autora porque no tenemos muchos ejemplos de ellos, pero la realidad es que lo ha hecho genial. Eso sí, Kat me ha sacado de quicio en muchos momentos. En cuanto a los personajes secundarios, he amado con toda mi alma a Diana y Kenny. ¡Y ambos tienen un libro con su propia historia! Estoy deseando leer ambas historias, aunque sé que la de Kenny me va a destrozar el corazón. En conclusión, es una historia sencilla, atrapante, fácil de leer, y con mucha magia. ¡Os la recomiendo muchísimo!