Poeta y novelista italiano, Alessandro Manzoni nació en Milán el 7 de marzo de 1785, descendiente de una antigua familia de terratenientes. Creció en Milán, pero en 1805 se reunió con su madre en París. En esta ciudad, se familiarizó con las ideas y principios del pensamiento de Voltaire, una influencia notable en sus primeras obras, que presentaban una tendencia hacia ideales antieclesiásticos y jacobinos. En 1808, se casó con Henriette-Louise Blondel, hija de un banquero suizo protestante. Dos años después, Henriette se convirtió al catolicismo, lo que llevó a Manzoni a reconciliarse con la Iglesia. A partir de entonces, el escritor dedicó su vida a la religión, al patriotismo (siendo un fuerte partidario del movimiento de liberación y unificación de Italia) y a la literatura. Su producción creativa se concentró entre 1812 y 1827, y luego se dedicó a estudios lingüísticos. Entre sus amigos cercanos se encontraban Tommaso Grossi, Massimo d'Azeglio y el filósofo Antonio Rosmini. Pasó la mayor parte de su vida en Milán, donde falleció el 22 de mayo de 1873.