¿Cómo podría elegir entre las dos mujeres a las que amaba, a una en cuerpo y a otra en alma? Reese Barrett no podía creer el número de mujeres que había dispuestas a consolar a un vaquero solitario. Pero la única que se había ganado su devoción había sido la dulce y sincera Natalie. Pero antes de que pudiera conocer personalmente a la mujer que le había escrito aquellas maravillosas cartas, apareció en la ciudad al seductora Shea Alexander y desató la libido de Reese. Natalie le había robado el corazón... pero Shea despertaba todos sus sentidos...