Grace Stephens jamás imaginó que sus fantasías más íntimas pudieran hacerse realidad, pero el millonario empresario Adam Bowen estaba acostumbrado a conseguir todo lo que quería, y rápidamente. Ahora quería que Grace pusiese en práctica todo lo que había escrito en aquella ardiente historia de amor protagonizada por Adam y ella.
Adam tenía el futuro de Grace... y su cuerpo en sus manos. Ella no tenía otra opción que pasar de ser su amante en la ficción a serlo en la realidad.