Bertolt Brecht –padre del teatro épico– es considerado uno de los dramaturgos más influyentes del siglo XX; su obra buscaba la reflexión del espectador, con ella se inicia una nueva etapa en el mundo teatral. Resulta válido señalar el modo en que esta polifacética figura puso de relieve en sus producciones, siempre cargadas de crítica hacia la sociedad, la necesidad humana de felicidad como base para la vida.