Irvine Welsh nació en 1958 en Escocia. Creció en el corazón del barrio obrero de Muirhouse, dejó la escuela a los dieciséis años y cambió multitud de veces de trabajo hasta que emigró a Londres con el movimiento punk. A finales de los ochenta volvió a Escocia, donde trabajó para el Edinburgh District Council a la par que se graduaba en la universidad y se dedicaba a la escritura. Su primera novela, Trainspotting, tuvo un éxito extraordinario, al igual que su adaptación cinematográfica. Fue publicada por Anagrama, al igual que sus títulos posteriores: Acid House, Éxtasis, Escoria, Cola, Porno, Secretos de alcoba de los grandes chefs, Si te gustó la escuela, te encantará el trabajo, Crimen, Col recalentada, Skagboys, La vida sexual de las gemelas siamesas, Un polvo en condiciones y El artista de la cuchilla.De Irvine Welsh se ha escrito: «Leer a Welsh es como ver las películas de Tarantino: una actividad emocionante, escalofriante, repulsiva, apremiante..., pero Welsh es un escritor muy frío que consigue despertar sentimientos muy cálidos, y su literatura es mucho más que pulp fiction» (T. Jones, The Spectator); «El Céline escocés de los noventa» (The Guardian); «No ha dejado de sorprendernos desde Trainspotting» (Mondo Sonoro); «Además de un excelente cronista, Irvine Welsh sigue siendo un genio de la sátira más perversa» (Aleix Montoto, Go); «Un genial escritor satírico, que, como tal, pone a la sociedad frente a su propia imagen» (Louise Welsh, The Independent); «Welsh es uno de nuestros grandes conocedores de la depravación, un sabio de la escoria, que excava y saca a la luz nuestras obsesiones más oscuras» (Nathaniel Rich, The New York Times Book Review).