Esta obra de Voltaire era una colección de ensayos satíricos y aforismos que abarcaban una amplia gama de temas filosóficos y sociales animando a la gente a pensar por sí misma. La obra fue importante porque cuestionaba las creencias religiosas y filosóficas tradicionales y defendía la importancia de la razón y la libertad individual en la sociedad. La Ilustración del siglo XVIII tenía la manía de crear diccionarios definitivos -Rousseau, Diderot y otros crearon los suyos propios-. El que Voltaire bautizó como Dictionnaire philosophique portatif en 1764 era un tipo particular de diccionario: la polémica sustituía a la objetividad, el diálogo suplantaba a la definición, la filosofía se mezclaba con la crítica de las religiones y el fanatismo. Fiel a su estilo, Voltaire combina su increíble erudición con una saludable dosis de humor, sátira e ironía para hacer que su lucha contra el "Infâme" sea eficaz y amena.