«Recuerdo de Matías su placer por competir, evidente al comprobar que,
al hacerlo, disponía de un porcentaje muy alto de sus cualidades. Tantos
años de crecimiento profesional y personal en los grandes equipos de las
mejores ligas no impidieron que, cada vez que me tocara verlo entrenar y
jugar, se hicieran visibles en él la misma frescura y entusiasmo de los
jóvenes que se forman en las divisiones menores de cualquier club de
nuestro país. Generaba aceptación, afecto y respeto, sin excepciones, en
los grupos que integraba. Era querido por todos, sin esforzarse por
conseguirlo».
Marcelo Bielsa
«Como jugador no era muy pegador, pero corría por todos. "Salí de acá",
le tenía que decir en las prácticas, porque no me la dejaba tocar.
Muchos se sorprenden ahora porque saca a las figuras en algunos
partidos, pero el que conoce al Pelado sabe que le puede errar, porque
todos nos equivocamos, pero por el lado de la personalidad y las bolas y
de estar seguro de lo que quiere, no lo vas a agarrar nunca en off
side».
Enzo Francescoli
Diego Borinsky nació en Buenos Aires en 1967. Es licenciado en Ciencias Biológicas (UBA, 1992) y periodista deportivo (DeporTEA, 1992). Dio clases de Taller Gráfico en DeporTEA durante veinte años. Trabajó en la revista El Gráfico entre 1992 y 2018, además de colaborar en diferentes medios escritos y audiovisuales del país y del exterior. Actualmente realiza las entrevistas de la sección "100 preguntas" en La Nación y es comentarista en la radio Cadena 3. Escribió diez libros, entre ellos las biografías autorizadas de Matías Almeyda (Alma y vida, 2012), dos de Marcelo Gallardo (Gallardo Monumental en 2015 y Gallardo Recargado en 2019, que van por la novena y séptima edición respectivamente), la de Andrés D'Alessandro (Cabezón, 2021) y una trilogía sobre Ángel Labruna (El jugador, El técnico y El personaje, 2022). Empezó a ir al estadio Monumental en 1975 y le hizo la primera entrevista a Gallardo en 1993, unos meses después de su debut en la Primera de River.