Esta no sólo es la historia de un niño y su abuelo que lo comparten todo: la recámara, las golosinas, el gusto por el béisbol, los paseos por el parque y el nombre: León. Este libro expone, de manera simultánea, los puntos de vista de los dos protagonistas -León abuelo y León niño- sobre las situaciones que viven juntos y lo que, aparentemente, le ocultan al otro para no lastimarlo. Así, con una sencilla historia, pero a la vez profunda y conmovedora, Toño Malpica nos lleva a experimentar diferentes emociones, a cuestionarnos acerca de la manera en que asimilamos nuestras propias vivencias y a ampliar nuestra mirada para comprender mejor al otro y a nosotros mismos.