« Espero, humano, que con solo oír mi nombre un escalofrío recorra tu cuerpo.»
Si no, pregúntales a las Criaturas mágicas o a las que viven en el Ártico quién soy; seguramente formo parte de sus pesadillas mástemidas, y eso a mí me gusta. Sepas que yo pienso, y Mayordomo actúa. Fui el primer humano que se enfrentó a los seres subterráneos y conseguí lo que quería: oro y algún secreto más.
Ahora todo parece volver a la normalidad: he rescatado a mi padre y mi madre está empeñada en que seamos una familia normal. Me queda poco tiempo para mi última maniobra... No sé si ni siquiera te mereces saber cuál es: pero, bueno, hoy me siento especialmente generoso, así que te adelanto que voy a chantajear a un magnate de la tecnología dela comunicación con un invento -mío, evidentemente--: el cubo B.
Y, ahora, ¿a qué esperas para empezar a leer?
Eoin Colfer nació en 1965 en Wexford, al sur-este de la costa irlandesa, donde creció junto a sus cuatro hermanos, su padre (maestro, historiador y artista) y su madre (profesora de teatro).
Empezó a mostrar interés por la escritura en la escuela primaria, con apasionantes historias de vikingos inspiradas en las lecciones escolares. Estudió magisterio en la Universidad de Dublín y volvió a la escuela de Wexford para trabajar.
Tras casarse, él y su mujer pasaron cuatro años trabajando en Arabia Saudí, Túnez e Italia, y empezó a escribir. Y su vida dió un giro cuando publicó el primer título de la serie «Artemis Fowl» en 2001: se convirtió en escritor a tiempo completo.
Ahora, sigue viviendo en Irlanda con su mujer y sus dos hijos. «Continuaré escribiendo hasta que dejen de leerme o hasta que se me acaben las ideas. Confio en que nada de esto sucederá pronto», declara con optimismo.