La ingenua Jocelyn descubre, no sin sorpresa, que su madre agonizante es la infame madame del burdel la Bella Carmesí. Tras prometerle que se hará cargo del establecimiento y de las chicas, Jocelyn se transforma y pronto es conocida como madame DeBourcier. Rakish Alex Randall, lord Colwick, está decidido a conseguir entrar en la cama de la nueva madame. Sus extravagantes intentos no serán ignorados mucho tiempo... Cuando el peligro acecha a la elegante mujer, Jocelyn cierra un trato con Alex, con la esperanza de que pueda proporcionarle protección. Pero el pacto de Jocelyn los arrastra a un apasionado duelo de voluntades en el que todas las ilusiones se verán sacudidas... y todas las fantasías serán cumplidas.