Del conjunto de estos textos âpublicados por primera vez en 2000 y reeditados ahora por Seix Barralâ pueden hacerse, entre otras, dos observaciones. Una: casi en su totalidad responden a un gesto de apertura al mundo cotidiano y de compromiso con estÃmulos culturales del dÃa tras dÃa. Son textos en los que alienta, de algÃēn modo, el espÃritu de la crÃŗnica, y no solo por su objeto (inevitablemente huidizo, cambiante, pasajero, provocativo), tambiÊn por la modalidad de la escritura, eminentemente periodÃstica. Dos: el discurso crÃtico de la autora se abre a la reflexiÃŗn suscitada y orientada por problemÃĄticas muy diversas, pero en varios puntos entrecruzadas: la memoria ensombrecida, traumada, de los tiempos de la dictadura y el modo, fraudulento a su juicio, en que la asume la transiciÃŗn; y los secretos designios del neocapitalismo postmoderno y sus implicaciones sociales, Êticas y estÊticas; los signos ofrecidos a sus desciframiento por las propuestas provenientes del mundo de la plÃĄstica, del video, del cine, de la fotografÃa, del bordado artÃstico, y desde luego, del mundo de la misma literatura, la propia y la de otros.