Más de 53 millones de niños no nacidos han sido asesinados en abortos legales cometidos en los Estados Unidos y Canadá. Ciertamente, deberíamos tener una base ética sólida para sancionar legalmente el final de tantas vidas en nuestras naciones, más más de un millón cada año. Por lo tanto, examinamos los argumentos utilizados por aquellos que promueven el aborto para determinar en qué medida se basa esta práctica. Luego nos dirigimos a un tribunal de autoridad más alto que el razonamiento humano para exponer las verdades de la Palabra de Dios que están involucradas en el tema del aborto.
Queremos una comprensión renovada entre el pueblo de Dios de lo que es este acto criminal y nuestra responsabilidad con respecto a esta catástrofe inconcebible. Este número de Portavoz comienza con una breve exposición del Sexto Mandamiento —‘No matarás’—por el predicador puritano Ezekiel Hopkins. Seguidamente, Peter Barnes nos presenta sobriamente la realidad y los métodos horrorosos del aborto, agregando un examen provechoso de las enseñanzas de la Biblia sobre el tema. R. C. Sproul presenta una investigación sobre las enseñanzas bíblicas de la santidad de la vida. George Grant nos brinda una breve historia de la matanza infantil y nos muestra bíblicamente por qué los seres humanos producen con tanta frecuencia culturas de muerte; nos muestra también que la vida tal como debiera ser origina en Jesucristo. ¿Necesita usted respuestas para los argumentos que presentan los defensores del aborto? Joel Beeke nos brinda respuestas bíblicas, científicas y sabias a los argumentos comunes de los que favorecen la decisión de una mujer de dar muerte a su criatura. Después de esto, R. C. Sproul examina las Sagradas Escrituras para responder a la pregunta crucial: ‘Cuándo comienza la vida?’ La Palabra de Dios enfoca claramente esta calamidad que azota a nuestra nación, y Joel Beeke nos presenta declaraciones bíblicas importantes sobre el aborto. Parece que son pocos los cristianos que de hecho ven una conexión entre el aborto y el paganismo; no obstante, Ed Payne nos da la conexión bíblica y advierte seriamente sobre el juicio de Dios sobre el sacrificio infantil.