No todo festival se desarrolla con ánimo festivo, ni toda blasfemia se pronuncia en vano. A esto viene el Festival de la Blasfemia.
Quien tenga las agallas para transitar esta historia inquietante, que tome este libro.
Quien no tema las remembranzas de imágenes escamosas, que lea estas páginas.
Quien se atreva a atesorar esta obra en su biblioteca, que no se pierda la primera Ópera prima de terror publicada de Dross Rotzank.