Pasaron casi doscientos años desde que Mary Shelley escribió Frankenstein y todavía hoy es considerado no sólo un clásico de la literatura, sino una de las historias más reconocidas de la cultura popular y un ícono del terror a lo largo del mundo. ¿Cómo permanecer indiferente ante la osadía de un científico que decide crear vida artificialmente? Ese conflicto –el del hombre jugando a ser Dios– atraviesa nuestra cultura de la mano de la genial creación de Shelley, nos habla de nuestros miedos, nos enfrenta con nuestro deseo de inmortalidad. Por estos motivos y por su indiscutible calidad literaria, Frankenstein y el monstruo que engendra logran aterrorizarnos, encuentran nuevos lectores, se mantienen con vida –vaya paradoja– a pesar del tiempo.
Ilukirjandus ja kirjandus