" Brooksmith " es una historia corta escrita por Henry James en 1891. La narración es exquisita y sale de boca de un hombre que frecuentaba la casa de un hombre de alta alcurnia y empleado de gobierno cuyo empleado principal —el mayordomo— es el foco del relato. El narrador, acompañado de otro grupo de visitantes, frecuenta la casa del diplomático gozando siempre de conversaciones amenas y noches inolvidables. Con el tiempo, el tipo comienza a notar que todo ese entorno, esas veladas espectaculares, poco debían su adjetivo al dueño de la casa y mucho a su mayordomo. El estudio se tornó minucioso una vez identificado su objeto principal, y el arte de Brooksmith fue siendo detallado.