¿Se atrevería ella a rechazar las condiciones impuestas para su matrimonio? Ariston Spiridakou había tenido una razón y solo una para casarse con Chloe: necesitaba una novia para conseguir un heredero. Pero la actitud retadora de ella los había hecho separarse... Paradójicamente, unos años después del divorcio, Chloe se encontró a merced de Ariston una vez más y él exigió un precio perverso por ayudar a su familia. De hecho, no tomaría en consideración tal petición a menos que compartiese su cama... y tuviese un hijo con él.