La pequeña ciudad de Koomera Crossing era el refugio perfecto para Laura Graham. Después de huir de su marido y de todo su pasado, Laura no tardó en sentirse como en casa, gracias sobre todo a su guapísimo vecino, Evan Thompson...
Evan también tenía motivos para esconderse, pero le estaba resultando muy difícil mantenerse alejado de Laura. Su aparente inocencia y su evidente belleza amenazaban con ablandarle el corazón...