Al comenzar el nuevo año, les ofrecemos el último número del FGB, Redimir el tiempo. Octavius Winslow introduce este tema crucial, proclamando que el tiempo es un regalo solemne y sin precio. Jonathan Edwards está totalmente de acuerdo y nos recuerda que la felicidad o la miseria eternas dependen de cómo utilicemos el tiempo. A. A. Hodge ofrece entonces breves definiciones de Dios, el tiempo y la eternidad. ¿Pensamos en el tiempo como una oportunidad? Richard Baxter dice que sí, que deberíamos, y da numerosas razones para apoyar su respuesta. A continuación, David Martyn Lloyd-Jones nos pide que prestemos atención a la exhortación de Pablo de comprar oportunidades para servir al Señor Jesús. Una vez más, no es probable que Baxter gane muchos amigos entre los cristianos modernos, ya que expone enérgicamente a los ladrones de tiempo que nos roban nuestro precioso don; pero deberías leerlo con atención, orar seriamente y examinar tu corazón con las Escrituras antes de descartarlo. Lloyd-Jones nos insta a reconocer las verdaderas diferencias entre los creyentes y el mundo perdido, argumentando que la forma en que los creyentes utilizan su tiempo debería ser un testimonio para los perdidos. Charles Spurgeon afirma y asegura a partir de las Escrituras que nuestro tiempo es limitado y corto: cómo usamos cada segundo importa. Jeremiah Burroughs aclara de forma alarmante que nuestro abuso del tiempo puede llevarnos a la pérdida más espantosa: la pérdida de nuestras almas eternas. Finalmente, Spurgeon declara la buena noticia de que Jesucristo murió en la cruz del Calvario y resucitó para salvar a los pecadores. ¡Pero debes creer en esa asombrosa buena noticia ahora, ahora, ahora! Entonces, ¿qué hora es, amigo? Es tiempo de arrepentirse, creer y ser salvado; o es tiempo de servir al Señor que nos amó y se entregó por nosotros. Puede que no tengas otro día para ninguna de las dos cosas. Le instamos a que dedique tiempo a meditar sobre este tema vital: los últimos granos de su reloj de arena están corriendo hacia la eternidad. Ahora es el momento.