También hace referencia a la contaminación en nuestras vidas del mundo digital, de las nuevas tecnologías y más en concreto de las redes sociales.
El Santo Padre recoge el extenso magisterio de san Juan Pablo II y de Benedicto XVI. Resultan novedosas las referencias que hace al magisterio del patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, en temas como el cambio climático, la deforestación y la destrucción de los humedales.
No se trata de un texto dirigido solo a católicos, sino que el propio Papa invita a todas las personas a reflexionar en serio, pues «nunca la humanidad ha tenido tanto poder sobre sí misma, y nada garantiza que lo utilizará bien».
No se ha introducido texto.