Walter Greatshell nació en California en 1962. Vivió en cinco países diferentes hasta que se instaló en Estados Unidos definitivamente. Ha realizado los trabajos más variopintos: desde pintor de casas hasta periodista y crítico de un periódico local, pasando por técnico de submarinos nucleares. A los dieciséis años vendió su primer relato, y desde entonces no ha dejado de escribir.