Claire Richards quería ganar aquel concurso porque la enorme casa sobre ruedas que obtendría como premio era la garantía para salir de Mercy, Indiana. Pero primero tendría que derrotar a los otros participantes, entre los que estaba Mark Dole, su guapísimo enemigo de la infancia. La pregunta era: ¿sería capaz de vivir en tan reducido espacio junto a aquel irresistible playboy?
Mark tenía sus propios motivos para emprender aquel extraño viaje, pero no tardaría en descubrir que la guapísima peluquera no tenía intención de jugar limpio.