Hailey Conway sólo quería llevar una vida tranquila y segura... hasta que el detective Nick Granger la salvó de un atracador y la volvió completamente loca.
Aquella noche apasionada habría sido suficiente para derretir la nieve que los había dejado aislados.
Después se habían despedido, pero Hailey no podía dejar de soñar con aquellos ojos oscuros y aquellos tiernos susurros... Sobre todo después de enterarse de que se había quedado embarazada.