Marina Lucchesi no sabía absolutamente nada del arte de la seducción, pero tenía que hacer algo para salvar a su hermano de la ruina.Ronan Carlisle era un hombre rico, guapo ... y con sed de venganza.Para Ronan la estrategia era muy sencilla: si Marina se hacía pasar por su amante, él se encargaría de que el hombre que tanto les había hecho sufrir a ambos recibiese su justo merecido. Pero Marina opinaba que era una locura. Nadie creería que un hombre como Ronan, el soltero más deseado y rico de Australia, pudiera desear a una mujer como ella.