Nair CR
Esta novela podría incluirse en el cliché compañeros de piso, ya que los protagonistas se ven obligados a vivir durante un verano en el mismo rancho. Abbi Glines consigue plasmas sus historias de forma entretenida y divertida. Lo primero que me impresionó de este libro fue la historia personal de Eva y su prometido, que había fallecido en una misión del ejército. Lleva una vida tranquila en el rancho, de hecho parece que no hace nada a nivel estudios o trabajo, y disfruta únicamente de la compañía de sus vecinos. Aquí me gustaría resaltar a Jeremy, el hermano de su prometido, que la cuida en honor a él. Por su lado, Cage se ve obligado por su entrenador de la universidad a trabajar en el rancho después de que lo pillaran conduciendo borracho. Lo que más me ha gustado de esta novela es la atracción de los protagonistas y lo bien descrita que está. Me ha gustado menos que ella sea virgen, como las cuatro protagonistas de estos libros que me he leído. Eva estuvo años con su exnovio e incluso estaban prometidos y con él no se acostó pero con Cage se acuesta relativamente pronto. No me gusta que en esta serie los chicos siempre sean unos ligones de cuidado y las chicas vírgenes y demasiado buenas. Son historias en las que sienten atracción muy rápido y, a pesar de que están en edad universitaria, empiezan sus relaciones cómo si tuvieran 14 años. Les obligan a separarse pero al final consiguen estar juntos, la forma en la que Eva vuelve a él me pareció preciosa. El final es cerrado y bonito, era innecesario continuarla como lo hizo la autora con la novela cinco de esta saga, creo que el cierre de Mientras dure era perfecto.