Diego Cortés llevaba cinco años sin pensar en otra cosa que no fuera Lisa Pennington... ¡y en vengarse de ella! Estaba seguro de que podría llevársela a la cama, aunque sólo fuera para que ella consiguiera salvar su negocio. Pero Diego no tardó en darse cuenta de que la había subestimado y de que la única manera de compensar los errores del pasado era convertirla en su esposa...