«La pasión por la mágica obra de Wagner me ha
acompañado toda mi vida, desde que la descubrí
y empecé a asimilarla y a penetrar en ella.»
Estas elogiosas palabras de Thomas Mann forman parte del controvertido ensayo escrito en 1933, aplaudido por muchos y denostado por personalidades de la época como Olaf Gulbransson o Richard Strauss. El autor de La montaña mágica analiza con pasión los claroscuros del carácter y el pensamiento de Richard Wagner, los mimos que dieran vida a una obra extraordinaria, monumental, que compara a la de grandes escritores del siglo XIX como Émile Zola o Lev Tolstói.
Thomas Mann (1875-1955), genial ensayista y narrador, publicó su primera novela, Los Buddenbrook, con solo veinticinco años. Con ella obtuvo un reconocimiento inmediato que se vio refrendado con la publicación de obras maestras como La muerte en Venecia (1912), La montaña mágica (1924), el ciclo José y sus hermanos (1933-1943) o Doctor Faustus (1947). En 1929 la Academia Sueca le concedió el Premio Nobel de Literatura.