Cómo una extraordinaria gata se convirtió en el corazón de la comunidad

Felix vive en la estación de tren de Huddersfield en West Yorkshire junto con sus colegas y cinco millones de usuarios. Nacida en una adorable familia en 2011, originalmente se pensó que era un macho y se le dio el nombre de Felix —antes de que una visita al veterinario confirmara lo contrario—. Su vida como trabajadora independiente comenzó con tan solo ocho semanas de edad y fue ascendida al puesto de directora controladora de plagas en 2016. Entre sus aficiones destacan la caza de palomas, echar una cabezada en horas de trabajo y las cosquillas en la tripa.

Cuando Félix llegó a la estación de Huddersfield con tan solo ocho semanas, nadie podía imaginar lo importante que esa pequeña bola de «pelo» llegaría a ser.

Si bien lleva a cabo un trabajo esencial como «Directora Controladora de Plagas», Felix es mucho más que una simple empleada de la TransPennine Express, ya que ha cambiado de forma sorprendente las vidas de sus colegas y de los usuarios de la estación.

Felix parece tener una increíble habilidad para realizar intervenciones decisivas en su día a día: desde sacar a un niño con autismo de su caparazón, hasta proporcionar consuelo a un chico fugado de casa que, una noche, temblaba de frío en el andén. Así que cuando la tragedia golpeó al equipo de Huddersfield, todos se apoyaron en Felix para recuperar el ánimo.

No obstante, fue su casual amistad con un usuario al que cada mañana espera en el andén, lo que finalmente proporcionó a Felix el reconocimiento que merecía, catapultándola hasta su estrellato internacional.

Kate H. Moore