Sin embargo, también puede utilizarse para crear conflictos y discordia.
Ocasionalmente, durante las conversaciones con nuestro cónyuge, familiares, compañeros de trabajo o amigos, podemos seleccionar palabras que causan angustia emocional a los demás.
Si bien no pretendemos ser groseros, es la forma en que nos comunicamos lo que genera sentimientos de amargura.
¿Cómo podemos participar eficazmente en una comunicación veraz sin causar daño emocional a los demás?