Un error cometido en una clínica de fertilidad convirtió a Luca Moretti en padre de una niña junto a una mujer a la que ni siquiera conocía. Y, una vez que lo supo, Luca no estaba dispuesto a apartarse de su hija bajo ningún concepto, pero solo contaba con treinta días para convencer a la madre, Claire Douglas, de que hiciera lo que él quería.
Claire todavía estaba intentando superar la muerte de su marido cuando descubrió que el padre de su hija era un desconocido. Un rico soltero que no pensaba detenerse ante nada para conseguir la custodia de la niña.